¿Te gusta el riesgo?

Este mes quiero resaltar como tema de interés el anuncio de Microsoft de que varios de sus productos, como Windows 7 y Windows Server 2008, dejarán de recibir actualizaciones de seguridad. Este hecho se producirá en enero de 2020.

A partir de entonces los equipos informáticos estarán expuestos a las nuevas amenazas que vayan surgiendo aunque dispongas de un magnífico antivirus. Serán muy vulnerables a los ataques de ransomware -aquel que te cifra todos tus archivos y te pide un rescate monetario- y a otros tipos de amenazas, tales como troyanos o keyloggers, que capturan los datos de acceso a tu cuenta bancaria.

Aparte de todo esto, los fabricantes de nuevos dispositivos como impresoras, escáneres o cualquier otro hardware dejarán de tener en cuenta Windows 7 para sus drivers, por lo que es posible que ya no sean compatibles. Obviamente los desarrolladores de aplicaciones también tendrán en cuenta el fin de vida de Windows 7.

Además, en el caso de empresas que cuenten con servidores que integren Windows Server 2008, el fin de ciclo representa una gran amenaza, no sólo para todo el contenido de ese servidor, sino también para toda la red de la empresa, sea cual sea el sistema que utilicen los equipos cliente.

Evidentemente, el principal consejo es que actualices a Windows 10 en el caso de poseer Windows 7, o, en el caso empresarial, actualizar a Windows Server 2019.